LAS AVENTURAS DE FERJO MUOVI Y DALIA

 

Capítulo 7: Los esclavistas

Inmediatamente regresamos al Pajarillo Diligente y es obvio que está siendo atacado por toda la flota, se mantiene gracias a los potentes escudos de nuestra nave, pero no serán eternos.

-Nave, ¿Tienes trayectoria para hiperpropulsión?

- Rumbo incorrecto pero el hiperpropulsor funciona

-Pues mierda, sácanos de aquí.

- CALCULANDO

Salto a ciegas al hiperespacio, no podemos saber con lo que nos encontraremos, pero espero que esta nueva habitante de la nave haga bien su función.

- SALTAMOS EN 3.... 2... 1....

-Ey! Ey! Ey! ¿No íbamos a luchar contra esos perros?

-¿Te crees que estábamos en situación de hacerlo Ferjo?

-Bueno, pues vámonos a algún planeta tranquilo donde posamos comer y beber algo decente no?

-Lo veo bien, ¡Nave! ¿Puedes establecer esos parámetros?

-Lo siento capitana Dalia, ya he establecido los parámetros como usted ordenó

-¡Qué asco de nave!

-Es igual que tú

- ¡Cállate!

SALIENDO DEL HIPERESPACIO EN 3, 2, 1....

-Vaya, no hay batallas y parece un planeta tranquilo, podríamos ir a comer y beber como dijiste antes.

-Nos vendrá bien a todos, Dalia.

Parece un planeta tranquilo, no obstante, bajamos con nuestras armas como siempre, Slob parece no poder ni poner su arma en la cartuchera, pero creo que será un viaje tranquilo.

-¡Mira Dalia! Parece un bar o pub como los de la tierra, a ver que hay por allí.

Entramos y es exactamente igual, me extraña no ver ningún alienígena en el lugar.

-¡Eh tú! ¿Eres propiedad de estos dos? -dice un borracho del pub-

Voy a sacar la pistola de la cartuchera pero Ferjo me lo impide.

-Sí, por supuesto que es de nuestra propiedad ¿Tratáis con esclavos alienígenas? ¿De qué razas? -interfiere Ferjo animosamente en la conversación-

Me quedo absolutamente anonadada aunque intento seguirles el juego sujetando a Slob por el hombro.

-De todo tipo: Escabasianos, reptiloides de andromasia, sintezoides gurlanos y por supuesto kareodionianos como el tuyo, son muy escasos.

-Sí, lo sé por eso no lo vendo.

Ferjo se acerca a mí. Son tratantes de esclavos, debemos de eliminar este asentamiento cuanto antes sin dejar escapar a ninguno -me dice mientras guiña un ojo- vámonos a la nave y volvemos.

Una vez en el Pajarillo Diligente noto a Ferjo está muy tenso, revisa todo su arsenal con parsimonia, fijándose en los detalles, finalmente se decide por una carabina Tigre de 10 tiros de los nuestros, osea, los cartuchos que usamos en la tierra, y rellena un par de cananas más, tiene que estar muy seguro para elegir un arma así, de todas formas yo cargo mi rifle predilecto, un desintegrador sónico muy capaz ademas del rifle de iones por si acaso.

Bajamos al planeta por la rampla de la nave y varios tipos nos están esperando.

-¿Sois los amigos de los esclavos?

Me pongo tensa y agarro fuerte mi pistola disruptora.

-¡Por supuesto! nos encantan los esclavos -dice Ferjo con una gran sonrisa-

-Oímos que teníais a una babosa kareodioniana con vosotros

-Por supuesto, esta justo ahí -dice Ferjo señalando el techo de la nave, y de un certero tiro de Slob la cara del esclavista se derrite-

-¡De nada!-dice Ferjo con su habitual tono burlesco-

Nos encaminamos a la cantina y afuera hay un montón de basura, parecen tratantes de esclavos, esñorgens, violadores y todo tipo de gente indeseable.

-Ferjo se apoya en una de las paredes y grita: ¡EY, ALGUIEN QUIERE A UN KAREODIONIANO FRESQUITO, RECÍEN TRAÍDO DE KARODEON-7?

Muchos personajes de diversas razas se agolpan a su alrededor, creo que sé lo que está haciendo, pero nunca nos cuenta sus planes, por lo cual suelen salir a medias.

-¡Oh sí! después de la refriega en Karodeon-7 me lo llevé fresquito -alardea Fejo-

Inmediatamente después descerraja cuatro descargas a todos los que le rodean sin inmutarse, después se cubre mientras yo paso inadvertida.

Cuatro tipos más aparecen desde la primer planta y disparan varias descargas térmicas hacia el suelo sin saber bien donde está su objetivo, las descargas impactan con un gran daño en el suelo y los anexos del local, Ferjo se mueve a través de las barandas como un lince y consigue acertar a dos de los tiradores que caen al suelo.

-FUCK YOU!!! HIJOS DE PUTA!!!!

Se mueve como una lagartija entre los rincones del local mientras los mercenarios siguen disparando sus cargas térmicas, algunas alcanzan a los parroquianos que salen dando alaridos, Ferjo los mira pero no tiene tiempo para eso y destroza a todos los sicarios que disparaban desde el primer piso. 

-Donde está vuestro líder hijo de puta -dice encañonando al barman-

El barman no sabe nada pero le mete un tiro en la boca. Se acuclilla en medio del local gritando ¿QUIÉN SABE DONDE ESTÁ EL ESCLAVISTA? mientras recarga su carabina

-¡VOY A MATAROS UNO A UNO HASTA QUE ME LO DIGÁIS!-grita con ira y un desprecio total-

-¡Tú! ¿Dónde está? -grita encañonando a un pobre lugareño, no lo sé, yo no se nada de esto. -responde-

Ferjo le mete un tiro en la cara.

-¿Quién es el siguiente? -dice con su rostro y hombros aún salpicados por los restos del pobre aldeano, sus ojos rezuman ira, una ira que jamás había visto en él, hoy se ha pasado de la raya-

Todos están totalmente aterrados, Slob y yo incluidos, jamás había visto a Ferjo ser tan salvaje.

-Está... Está  en la casa más grande señor, al sur de aquí. Es una villa....

Ferjo no se inmuta, guarda el revolver y sale por la puerta sin esperarnos

-Acabas de matar a un inocente, ¿A ti que coño te pasa tío?

Me ignora por completo y sigue caminando sin oírnos, se dirige hacia esa casa.

Obviamente está bien defendida pero Ferjo saca su carabina y los coge por sorpresa, Slob y yo ayudamos, pero parece que no le hace falta nadie más, está totalmente desatado, cuando tiene que recargar se agazapa en cualquier lugar, cualquier cobertura y se lanza otra vez al combate, parece una película de vaqueros. Slob y yo apuntamos a blancos claros pero el va a quemarropa.

Finalmente entre el humo y los destellos de nuestras armas aparece un hombre de cierta edad, pelo cano, traje blanco y un exquisito bastón del mismo color

-¿Qué es lo que quieres?

-Creo que ya lo sabes, todos lo esclavos libres

-¡No puedes hacer eso!

- ¿Como que no huevón? ¡Eres una gonorrea, malparido! -Reconozco que el acento no está tan mal, pero lo exagera como si fuera el puto Pablo Escobar-

-¿Qué es lo que quieres? 

-No, no, no. No es lo que yo quiera, es lo que tu  quieres. ¿Plata o plomo?

-¡No entiendo!

En ese mismo instante le vuela la cabeza con su revolver mientras yo me quedo perpleja, Slob aparta la mirada y Ferjo se queda mirando como el cadáver con vehemencia durantes largos segundos con una mirada horrible.

Después de todos estos acontecimientos Ferjo sale escupiendo sobre los cadáveres mientras nos insta a seguirle. Una vez en el pueblo con toda la gente el la plaza, Ferjo agarra fuerte su revolver y grita.

-AQUÍ YA NO HAY ESCLAVOS, SI HAY ALGÚN ESCLAVISTA QUE SE DEJE VER AHORA. SI  ME ENTERO DE QUE VUELVE A HABER ALGUNO, VOLVERÉ Y LOS MATARÉ A TODOS.

Tras estas palabras y aún con su Schofield humeando en su cartuchera se dirige despacio hacia la nave, sin prisa, como alguien que acaba de hacer algo que no le gusta, pero que debe de hacer, y esta como en otras ocasiones, hizo algo bueno por un pueblo.